Migrar es una hermosa oportunidad pero también un gran desafío…
Estados Unidos es una tierra forjada en base a la inmigración. Las nuevas personas que llegaron al país durante cientos de años exploraron nuevos lugares, conocieron nuevas personas e ideas y establecieron intercambios culturales creando una cultura nacional única que valora la diversidad, la independencia y la responsabilidad. En esta nota presentamos algunas de las millones de historias de migrantes a los Estados Unidos. Cada historia es única e irrepetible pero de todas podemos aprender algo especial.
Hoy se celebra el Día de la Igualdad de la Mujer en los Estados Unidos ya que se conmemora la certificación de la “Enmienda 19” a la Constitución en 1920, que otorga el derecho al voto para las mujeres. Es por eso que hemos elegido compartir con ustedes historias cortas de migrantes mujeres que han defendido valientemente sus derechos y han luchado por salir adelante.
Los discursos más extendidos han pintado a las mujeres como actores pasivos en la migración, moviéndose como dependientes de sus cónyuges o para la reunificación familiar. Sin embargo, en muchas ocasiones las mujeres migrantes han sido protagonistas de su propio camino migratorio, han decidido su propio futuro y luchado incansablemente para conseguirlo.
A continuación presentamos algunas de las millones de historias de migrantes a los Estados Unidos que de seguro nos conmoverán y nos inspirarán a continuar luchando por un futuro mejor y más tolerante.
1- Historias de Migrantes a los Estados Unidos – Isabel Allende
Isabel Allende es una escritora chilena (pues de ahí es su familia y allí vivió mucho tiempo) con nacionalidad estadounidense, de ascendencia hispano-portuguesa y nacida en Perú. Actualmente vive en los Estados Unidos. Describe así su historia migrante:
“He sido extranjera toda mi vida, primero como hija de diplomáticos, luego como refugiada política y ahora como inmigrante en Estados Unidos. He tenido que dejar todo atrás y empezar de nuevo varias veces, y he perdido a la mayor parte de mi familia extendida. Aquí en California, he intentado recrear un sentido de familia extendida con algunos amigos leales elegidos. Yo los llamo \’mi tribu\’. Funciona mejor que una familia real porque estamos juntos por elección y no por obligación. Mis nietos han crecido en esta pequeña tribu y no creo que sepan que ni siquiera somos parientes consanguíneos.”
2- Historias de Migrantes a los Estados Unidos – Rita Moreno
Rita Moreno es una consagrada actriz, bailarina y cantante nacida en Puerto Rico. Creció en el Bronx y actualmente es la única latina del envidiado grupo de 12 personas con un EGOT: Emmy-Grammy-Oscar-Tony. Su historia es dura, como muchas de las historias de niños migrantes, pero cuenta cómo logró superar las adversidades.
“Cuando tenía 5 años, mi madre me trajo con ella a la ciudad de Nueva York desde Puerto Rico. El choque cultural está todavía grabado en mi memoria de casi 90 años. El idioma, la nieve —nunca había visto nieve— el racismo, incluso entre los niños, los insultos. De repente, era diferente. Nunca había sido diferente. O nadaba o me ahogaba; desarrollaba carácter o me rendía. Afortunadamente, me sirvió de ejemplo el temple de mi madre. Nunca te rindas, nunca te des por vencida, muévete. Así era mi mamá, y así soy yo.”
Rita tuvo que enfrentarse a momentos muy difíciles, teñidos por la discriminación y el abuso sexual. Incluso en el ámbito laboral, cuenta que después de haberse consagrado solo le ofrecían “roles de hispana temeraria”. Opina que los papeles para los latinos no han cambiado lo suficiente en Hollywood. “Estamos considerablemente subrepresentados” pero se mantiene positiva:
“Estados Unidos todavía es la tierra de los soñadores. Ruego por que siempre le dé la bienvenida a las personas de todos los lugares del mundo y que nuestra diversidad aumente. ¡Más sabor criollo en el crisol!”
3 – Historias de Migrantes a los Estados Unidos – Dolores Huerta
Dolores Huerta nació en Nuevo México por lo que la suya no es estrictamente una de las tantas historias de migrantes a los Estados Unidos. Pero si consideramos su familia, su cultura, sus intereses y su lucha política, definitivamente sí lo es.
Dolores Huerta fue una de las activistas laborales más influyentes del siglo XX y aún hoy lo sigue siendo. Durante muchísimos años se posicionó al frente de la lucha por los derechos de los trabajadores agrícolas (a menudo inmigrantes) y por mejoras económicas para las comunidades hispanas. En 1960, Huerta ayudó a fundar la Asociación de Trabajadores Agrícolas, donde conoció a su compañero activista y líder sindical César Chávez.
En 1962 cofundaron la Asociación Nacional de Trabajadores Agrícolas, que fue el predecesor del Sindicato de Trabajadores Agrícolas Unidos formado en 1965. Huerta ayudó a organizar la huelga de más de 5.000 trabajadores de la uva y el posterior boicot a una reconocida empresa vitivinícola..
Huerta negoció contratos para trabajadores y gestionó todo un sistema de contratación para aumentar la cantidad de puestos de trabajo disponibles. También luchó contra el uso de pesticidas nocivos y por beneficios de desempleo y atención médica para los trabajadores agrícolas y migrantes.
“Tenemos que incluir, desde preescolar, las contribuciones y esfuerzos de mujeres, personas de color e hispanos en nuestras escuelas de hoy en día. Esta es la única manera de acabar con la ignorancia y discriminación que existe hoy en el mundo” opinó Dolores Huerta durante una entrevista.
En Inmigrando con Kathia esperamos que les hayan gustado estas historias de migrantes a los Estados Unidos. Los invitamos a que nos dejen sus reflexiones y, si quieren, compartan con nosotros sus propias historias de vida. ¡Nos encantaría leerlos!